El germen del mal

Encontré una idea que puede ayudar a muchas personas a identificar un problema muy frecuente que queda oculto la mayoría de las veces y condiciona fuertemente la conducta humana, afectando a nuestros logros individuales y como sociedad.

La educación y la instrucción son indispensables para lograr conocimiento, con el mismo podemos avanzar. Al abrir la mente contrarrestamos el Ego personal y las limitaciones que pueden estar cercándonos desde lo más próximo, incluso desde la familia.

Para aprovechar la educación y la instrucción hay que abrirse e impregnarse, de tal modo con la ayuda de nuestro cerebro podemos procesar y adquirir conocimiento provechoso para nosotros y los demás.

Hay dos fenómenos que atentan contra el resultado feliz de lo arriba mencionado: uno es la educación descalificada y otro es la no revisión de la postura personal con el empuje del Ego por intentar predominar sobre los demás a cada momento, sin la visión a largo plazo.

Cuando la educación de una sociedad lleva tiempo en crisis, se altera la escala de valores y predominan los Egos a cada momento, por lo tanto se afecta seriamente el bien común. Ocurre que hay oportunistas beneficiándose y hay perjudicados, pero no hay desarrollo social, ni a nivel grupal, familiar, comunitario o de país como nación. Menos puede haber desarrollo económico aunque se de un crecimiento económico.


¿Cómo hacer si uno está atrapado en este problema?

La solución pasa por buscar fuentes de educación calificada y dejarse impregnar por instrucción disciplinada. Con ello doblegamos el Ego y miramos hacia un horizonte que suele ser común a otras personas. De tal modo se ordena una escala de valores y mejoramos para nosotros y los demás.